viernes, 4 de noviembre de 2011

De feriado, de pecado, o perdiendo el tiempo ???

Primeramente soy Pastor, que quede claro eso en relación a lo que voy a escribir. En estos días, hemos estado "gozando" de un feriado decretado por el gobierno de nuestro país, y como es de esperar, la gente busca un tiempo para descansar, para cambiar su rutina diaria por una diferente, no tan presionada ni tan llena de actividades.

Por otro lado hay la idea, o se quiere imponer la idea de que como Dios nunca descansa, son justamente esos días los que debemos utilizar para seguir trabajando para Su obra, pues Él no se detiene en bendecirnos, cuidarnos y protegernos. De hecho, yo en algún momento de mi vida me pregunté ¿qué nos pasaría si Dios se va de feriado? ¿qué si Dios ya no contesta nuestras oraciones porque se fue de feriado?. Estas preguntas probablemente nos hagan sentir algo culpables en relación a descansar durante los feriados, pues debemos desgastarnos para Él, ya que Él lo hizo todo por nosotros.

Aún cuando suenen algo lógicas las preguntas, hay algo que debemos reconocer, y es que Dios, a diferencia de nosotros, no está sujeto a espacio ni tiempo, Él no está sujeto al ajetreo diario ni al desgaste físico, las preocupaciones no le afectan como a nosotros, el presentar reportes, dar soluciones a problemas, terminar tareas antes de que empiece el feriado, todo esto está muy por debajo de nuestro Padre Celestial, y nada de esto lo puede detener. Es alentador reconocer que el propio Jesús dijo que estaría con nosotros todos los días hasta el fin del mundo, y eso lo creo 100%.

Pero qué de aquellos que entre semana por estar sujetos a tiempo y espacio, no pueden estar con los suyos todos los días? Qué de aquellos que por estar sujetos a un ritmo de vida ya establecido, anhelan un tiempo de respiro, para cambiar su rutina, su ritmo de vida a uno más suave, llevadero y hasta "agradable" ... será eso dejar a un lado a Dios?  ... será eso no cumplir con la Gran Comisión? ... estamos siendo discípulos negligentes? ... o quizás estamos cayendo en otro aspecto de lo que significa seguir a Cristo?.

Recuerden que inicié diciendo que soy Pastor. Será que el faltar a la iglesia porque hemos decidido utilizar este tiempo para estar en familia, para descansar de nuestra rutina diaria, es alejarse de Dios? Será que solo aquellos que durante un feriado asisten a la iglesia son los que "se llevan la bendición"? ... y qué de los que sin asistir a la iglesia, aún en su tiempo de descanso, buscan de Dios, meditan en Su Palabra o simplemente le agradecen en silencio, por la bella oportunidad de salir con su familia, compartir con ellos un poco más y divertirse sanamente, sin que esto implique la desaprobación de nuestro Padre Celestial sobre lo que hacemos o dejamos de hacer.

Salomón decía que todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del sol tiene su hora (Ecl.3:1). Bajo esta premisa, hay tiempo para salir de vacaciones, así como hay tiempo para trabajar, e incluso también hay tiempo para no asistir a la iglesia, así como hay tiempo para ir a la iglesia. Pero por otro lado el autor de Hebreos dice que no debemos dejar de congregarnos como algunos tienen por costumbre, y tanto más cuando aquel día se acerca (Heb.10:25). Dónde está el balance? Hay acaso contradicción? ... de ninguna manera amados y amadas.

Me atrevo a dar una conclusión, no solo como Pastor, sino también como esposo, como padre, como ser humano, consciente de mi necesidad de estar cercano a mi Padre Celestial:

Puedo irme de vacaciones, e incluso llegar a faltar a la iglesia, siempre y cuando eso no se haga una costumbre, pues aún cuando puedo reclamar que todo tiene su tiempo, debo de recordar con temor y temblor que aquel día se acerca y por lo tanto debo entender que la mira debe estar puesta en las cosas de arriba, no en las de la tierra, y en cada cosa que haga reconocer la misericordia de Dios, vivir y actuar para Él, gozar cada momento que Él nos da y retribuirlo con mis fuerzas, energías y oportunidades para que Su nombre sea exaltado. Si el asistir a la iglesia justo en tiempos de feriado lo tomas con desgano, es tiempo de analizar lo que realmente hay en tu corazón. 

Estar en sintonía con Dios es algo integral, y nuestra relación con Él debería ser mayor a como nos relacionamos con la gente que nos interesa. Una relación no depende de las circunstancias, depende de la realidad de la presencia de los demás. Si fuéramos más conscientes de la presencia de Dios siempre con nosotros, nuestra relación con Él, sería más natural, independientemente de la circunstancia que se atraviese, sea positiva o no. 

Si uno entiende que Dios es Su Padre, esa relación no se puede congelar por ningún feriado. Ahora, si de manera habitual no cultivas tu relación con Dios, no lo buscas en oración, ni leyendo Su Palabra, entonces cuando lleguen los feriados ... puntos suspensivos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario